03-06-2013

Selecci贸n de Psic贸logos para Cargos P煤blicos

El Colegio de Psicólogos fue invitado a participar como miembro del jurado en selección de Psicólogos para Centros de Salud en Rafaela.

Los días pasados, 3 y 10 de mayo, se realizó en la localidad de Rafaela una selección abierta de Psicólogos para cubrir vacantes ocasionadas por el traslado en sus funciones de profesionales de dos centros de salud de la mencionada ciudad.

El Colegio fue invitado por la Dirección de Salud Mental, a participar como integrante del jurado a cargo de la misma, y concurrió el Lic. Daniel Lascano en representación de nuestra institución. Vemos con mucha satisfacción que diferentes estrategias y acciones de esta Comisión Directiva van posicionando al Colegio como un interlocutor válido en asuntos de salud pública, cosa que hace un tiempo no ocurría.

A lo largo de estos años de gestión que llevamos, muchas veces hemos ratificado el lema que nos guiara primeramente “por las leyes que supimos conseguir”. Ocasiones como éstas nos enfrentan al dilema de participar del “mientras tanto” con la convicción de que no es esto lo que exigen las leyes vigentes y que lamentablemente, una vez más,  las políticas no están a la altura de la ley.

En este caso aprovechamos la ocasión para ratificar el anhelo de esta Comisión Directiva de que se ponga en vigencia, luego de más de 20 años de congelamiento, la ley de concursos: el medio más transparente y democrático para que la población ciudadana se encuentre atendida por los profesionales que demuestren capacidad, idoneidad y formación en la materia. Este punto, que aún despierta cierto escozor en los profesionales que ejercen en el ámbito público, es una operatoria de prestigio y muy defendida en ámbitos académicos. Cabe recordar que la puesta en vigencia de este modo de acceso a puestos en la administración pública era una de las promesas de campaña del partido político gobernante en la provincia.

Por supuesto que algún valor es adjudicado al paso dado en este sentido, la conformación de un jurado integrado en su mayoría por colegas, pertenecientes a distintas instituciones: la Dirección de Salud Mental de la Provincia, la Coordinación del Nodo de Salud de la ciudad de Rafaela, el Colegio de Psicólogos de la 1ra circunscripción y el Hospital Jaime Ferré de Rafaela, hace de la selección realizada una propuesta que resulta superadora de las designaciones arbitrarias. Esperamos que a este paso se sumen muchos más, los necesarios hasta alcanzar lo marcado por la ley.

Luego de las dos jornadas, la primera destinada a la valoración de antecedentes, y la segunda a las entrevistas. Resultaron seleccionadas las colegas Lic. María Celeste Díaz mat. Nº 1362 y Lic. María Verónica Armando mat. Nº 1001.

Apoyamos la tarea que se ha realizado dentro del Ministerio de Salud en función de normalizar años de irregularidades en la administración pública y en el atropello de los derechos de los profesionales trabajadores, de inestabilidad laboral y contratos basura, con el pase a planta. Pero destacamos que el mismo gobierno provincial sostiene esas condiciones laborales aberrantes con colegas en el Ministerio de Desarrollo Social, por ejemplo. Y a ello agregamos que como Colegio debemos defender los derechos de los colegas que ejercen en lo público y los de los muchos que nunca tuvieron la oportunidad de acceder a dichos puesto.

Tampoco acordamos con el discurso actual de que las plantas son suficientes, argumento que unido al recorte y congelamiento presupuestario que atraviesa la provincia, resulta en la ausencia del aumento de presupuesto e inversión que exige la Ley Nacional de Salud Mental, hasta alcanzar el 10% del presupuesto total de salud.  Sostenemos además que el incremento que sugiere la ley no debe interpretarse solo en términos financieros, sino de infraestructura, personal, residentes e instalación de nuevos servicios sustitutivos a las lógicas manicomiales.

No podemos adjudicar el revés de la promulgación de la ley de autismo más que a la distancia que separa la vigencia de las leyes de las políticas públicas fehacientemente puestas en práctica.

Una última reflexión en este mismo sentido es la de sentir que el acto legislativo va desdibujando su poder instituyente, no solo por que leyes que aclamamos en su sanción son ignoradas permanentemente sino porque casos como la reciente sanción de la Ley de autismo nos permite pensar que la sanción legislativa en los estamentos ejecutivos y legislativos del gobierno, no constriñe al cumplimiento de lo pautado, sin cálculo previo de lo que implican los servicios y asistencias que “prometen”.